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Es el personaje central de la Semana Santa, en él se encierra el esfuerzo encargado en portar en sus hombros las imágenes de su devoción. El carguero está revestido con un túnico de diferente color, con el cual se resalta la labor de la penitencia. Acompañando al túnico se tiene un cordón o cíngulo, el cual combina muy glamurosamente con el color del túnico, un capirote que puede ser del mismo color del túnico o que resalte la cabeza y cara del carguero, con lo cual se demuestra la penitencia y humildad, sus manos van cubiertas con guantes en su mayoría de veces de color blanco o azul oscuro y lo más importante sus pies descalzos en completa demostración de fé y penitencia, honrando la Pasión, Muerte y Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo.
Es un Soporte de madera o metal (aluminio o hierro fundido) que en su parte superior tiene una “U” metálica que es donde engancha el larguero o barrote que soporta el anda. Es utilizada (o) por 4 de los cargueros pueden ser los punteros y tras punteros o los cargueros que están pegados al anda, son utilizadas (os9 para hacer recesos cortos durante el recorrido de las procesiones o durante lo largo del Santo Viacrucis desarrollado en la mañana del Viernes Santo alrededor de la Plaza de Bolívar.
Miembro Activo de la Sociedad de Nazarenos revestido al igual que los cargueros y la diferencia resalta en que el capirote es más alto y en forma de cono o bastón, va adelante del paso como guía del mismo durante las procesiones, aromatizando con su sahumador o incensario el cual va encendido con carbón de leña y se vierte incienso o diferentes aromas dependiendo de la tradición del paso o grupo. Va acompañado de pequeños monaguillos o Nazarenitos quienes portan el carbón en un balde metálico y en una copa o porta incienso y quienes depositan sus materiales cuando lo solicita la Loba o Sahumador. Esta actividad se realiza para ir purificando el aire al paso de las imágenes y en homenaje a Jesucristo Redentor.
Vestido impecablemente y con sus manos cubiertas con guantes blancos, porta una escarapela en su pecho que demuestra la importancia de su labor y de la nobleza de su rango espiritual: Su gran e importante labor es coordinar los diferentes desfile procesionales manteniendo el orden y la pulcritud de los mismos.
Son los aspirantes a ser "carguero" y que dada su fé, devoción y piedad, quieren tener una oportunidad para llevar sobre sus hombros los pasos y ser miembros activos de la Sociedad de nazarenos de la Ciudad de Tunja. El tiempo que debe permanecer en escuela asistiendo a todas las actividades es por un lapso de dos (2) años, periodo después del cual presentaran un examen rigurosos sobre todos los aspectos importantes que componen y rigen a la Sociedad de Nazarenos de Tunja y luego ante la Asamblea General toma juramentó y prometen cumplir fielmente con los mandamientos de la Sociedad, se les hace entrega de su carnet y del escudo, que los identifica como Nazarenos Activos.
Es llevado por los Nazarenos que conforman el grupo de los Socios Honorarios, que son los Nazarenos que ya han prestado su servicio por más de veinticinco (25) años y que dado su estado de alud o su edad ya no pueden ejercer como cargueros, o por los Aspirantes o integrantes de la Escuela Nazarena. De igual forma puede ser portado por personas que conforman el grupo de benefactoras o que por su fe y piedad desean hacer penitencia portando el estandarte de cada paso.
Son los encargados de entonar música instrumental, pertenecen a los diferentes colegios de la ciudad de Tunja o de Municipios vecinos que quieran acompañar los desfiles procesionales de la Semana Santa, de igual forma son las bandas de la Policía nacional y el Ejército nacional quienes año tras año son invitados de honor a acompañar las diferentes procesiones en alabanza al Señor.
Son los protagonistas de la peregrinación y portan consigo faroles con velas encendidas, de igual forma que los cargueros van revestidos pulcramente con sus túnicos por lo general en color azul oscuro y guantes blancos, lo cual significa que están abriendo un camino de esperanza cargando con la llama de la fé cristina por las calles de la ciudad de Tunja, hacen fila de honor al paso de las diferentes imágenes que conforma las nueve procesiones que se realizan en el transcurso de la Semana Santa en la ciudad de Tunja.
Como su nombre lo indica es el soporte donde se colocan las diferentes imágenes que van a ser portadas por los Nazarenos, se compone de una plataforma en madera finamente labrada o esculpida y los largueros donde colocaran los hombros los Nazarenos para cargar como muestra de Fe, Tradición y penitencia las diferentes imágenes en las procesiones.
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LOS ORIGENES HISTORICOS DE LA SOCIEDAD DE NAZARENOS DE TUNJA
La Sociedad de Nazarenos de Tunja tiene sus orígenes en la mitad del siglo XVI, cuando el cura párroco de la ciudad de Tunja, Don Juan de Castellanos, organizo la semana Mayor, que ha tenido su tradición de cuatro siglos y medio en Tunja, como también lo ha sido en Santa Fe de Bogotá, Popayán, Mompós, Pamplona y otras ciudades. Este gran humanista y cronista, natural de Alanís (España), autor del libro “Elegías de Varones ilustres de Indias”, una obra escrita en 113.609 versos, fue beneficiado de la parroquia de Santiago de Tunja durante 45 años, hasta su muerte en el año 1607. Con verdadero dinamismo lucho y logro la construcción de catedral de Tunja, con grandiosidad arquitectónica y artística. Con sus tertulias apoyo a grandes pintores, escultores y arquitectos, convirtió a Tunja en la ciudad cultural más importante del Nuevo Reino de Granada.
En los finales del siglo XVI se creó en Tunja la primera SOCIEDAD DE NAZARENOS, que se preocupo por la organización de las procesiones de la semana santa con gran pompa y devoción. Sus antecedentes se encuentran en Sevilla (España), en las hermandades de Semana Santa, que aún hoy se encuentran en las organizaciones de los “Tronos”, o pasos que sirven de base para representar el Viacrucis o drama de la pasión en sus diversas expresiones y cuyos conjuntos artísticos se presentan estéticamente decorados. La semana santa es la expresión más grande de la piedad cristiana en el mundo. En un pueblo de esencia cristiana como Tunja, la semana Mayor representa la presencia del fervor religioso y una organización de fama nacional de las procesiones.
Desde el siglo XVI, ya hace cuatro siglos y medio, la Sociedad de Nazarenos de Tunja, ha organizado los pasos en las procesiones: el paso de la Sentencia, el paso de la Oración en el Huerto, Cristo Atado a la Columna, el Santo Ecce Homo, Cristo con la Cruz a Cuestas, el Señor Caído, San Pedro con las Llaves, las Tres Marías, la Verónica, la Magdalena, la Crucifixión, el Santo Cristo, el Cristo del perdón, Jesús en Brazos de su Santísima Madre, la Dolorosa, el Santo Sepulcro; el Lidnun Crusis, y otras. Se organizaron las cofradías, para llevar los pasos en las procesiones. Cada cofradía cuidaba sus pasos y se reunían varias veces en el año para precisar la asistencia social a sus miembros, elegir nuevos dignatarios y tratar diversos asuntos de la corporación.
Siguiendo la tradición de las Hermandades sevillanas, las familias Tunjanas, tradicionales se encargaban de organizar los pasos, los cuales siempre han sido por siempre muy engalanados y decorados. Posteriormente no se tuvo en cuenta la tradición de la nobleza, sino de las familias Tunjanas, y el grupo de personas con espíritu cívico y religioso que se unen para la organización, decoración de los pasos y la relación con los demás pasos en las procesiones, esta tradición se ha transmitido de generación en generación.
LA SOCIEDAD DE NAZARENOS DE TUNJA, recibió su personería jurídica No 039, del 02 de abril de 1982. Es una institución con más de 350 nazarenos, distribuidos en 26 grupos que organizan y llevan los pasos en las procesiones de Semana Santa. Cada grupo alrededor de su paso tiene un Jefe, quien es el encargado de ordenar y de lograr la dinámica del grupo. Asimismo, su relación constante con la Junta Directiva, encargada de la organización de todos los pasos en las procesiones de Semana Santa.
En la segunda mitad del siglo XX, destacamos la acción de Monseñor JORGE MONASTOQUE VALERO (q.e.p.d), quien con su acción parroquial en la Catedral de Tunja colaboro decisivamente con la Sociedad de Nazarenos en su conformación y en la organización de las procesiones en la Semana Santa.
Esta visión histórica de la Sociedad de Nazarenos de Tunja, la corporación más antigua de esta ciudad, con más de cuatro siglos y medio de existencia, refleja la grandeza y pompa de la Semana Santa en una de las ciudades Colombianas de más tradición hispánica y colonial. Por ello es importante que todos los Tunjanos tengamos el orgullo de esta conmemoración religiosa del Mundo Católico, una de las más organizadas de Colombia, que necesita del interés y la colaboración de todos para su mayor dinámica y difusión a nivel nacional y mundial.
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